La Segunda República es uno de lo episodios que más polémica ha generado en la historia de España siendo objeto de todo tipo de manipulaciones políticas. Por eso es necesario aclarar qué fue la segunda república y contar su historia desde el punto de vista más objetivo posible.
La II república comienza llamar a las puertas de la historia más de un año antes de su proclamación. En enero de 1930 el dictador Miguel Primo de Rivera presentar su dimisión ante el Rey Alfonso XIII tras quedarse sin apoyos y sufrir serios problemas de salud.
A la dictadura, le seguiría una corta etapa de transición conocida como la “dictablanda”, comandada por el general Berenguer. El término dictablanda surge porque el general Berenguer se quedó a medias entre la dictadura anterior y la restauración de la constitución de 1876 anterior a la dictadura de Miguel Primo de Rivera. El 13 de febrero de 1931, Alfonso XIII nombra como nuevo presidente del gobierno a otro militar, el Almirante Aznar, quien convoca elecciones municipales para el 12 de abril.
Como veis, después de que España se comiese 7 años de dictadura militar de Primo de Rivera, a nadie extrañaba que los militares tuviesen el poder político del país, con el visto bueno del rey Alfonso XIII.
Las Elecciones Municipales de 1931
Las elecciones municipales de 1931 se presentaban como un termómetro de la voluntad del pueblo español. Por un lado los sectores más conservadores eran partidarios de la monarquía mientras que los más progresistas e incluso revolucionarios ansiaban la II República.
En las zonas rurales, las elecciones estuvieron marcadas por grandes irregularidades como muertos que votaron o caciques que obligaban a otra gente a votar por candidaturas monárquicas.
Esto provocó que los resultados de las elecciones fuesen dispares. En las ciudades los partidarios de la República ganaron claramente, consiguiendo la victoria en 41 de las 50 capitales de provincia. Sin embargo en los pueblos fueron los monárquicos quienes sacaron mejores resultados. En cualquier caso las elecciones dejaban claro que aquellos lugares donde las elecciones habían sido mayoritariamente libres habían votado en masa a la República.
14 de abril de 1931: la Proclamación de la Segunda República
La noche del 13 de abril corrió el rumor por Madrid de que Alfonso XIII se había ido de la ciudad rumbo a la frontera, por lo que la gente salió a la calle para festejar la marcha del rey. Sin embargo, Alfonso XIII seguía en Madrid y ordenó al ejército disolver la manifestación de la puerta del sol. El ejército no se mojó y no obedeció las órdenes del rey, lo que hizo que Alfonso XIII decidiera hacer las maletas y abandonar el país.
Eibar fue la primera ciudad en alzar la bandera tricolor y proclamar la República la madrugada del martes 14 de abril de 1931. Después lo harían más ciudades en toda España. En Barcelona Francesc Macià proclamó la República Catalana aunque finalmente esta acabó por no separarse del resto de España.
El Bienio Progresista 1931 – 1933
Al frente de la nueva república se formó un gobierno provisional presidido por Niceto Alcalá Zamora que inmediatamente lleva a cabo las primeras reformas. Una de estas es aumentar un 50% el presupuesto de educación para abrir 5.000 escuelas al año y así alfabetizar a la población. También de inmediato Manuel Azaña, ministro de la Guerra, lleva a cabo una reforma para modernizar el ejército. Esta nueva reforma enfurece al sector más conservador de la fuerzas armadas que comienzan a distanciarse de la República.
Las reformas republicanas
El 28 de junio de 1931 el PSOE gana las elecciones, seguido por un partido de centro llamado el partido radical. De estas elecciones surge un etapa de dos años con Manuel Azaña al frente conocida como el bienio reformista. Durante el bienio progresista nace la Constitución de 1931 una nueva carta magna muy moderna que reconocía derechos como:
- La Libertad de circulación.
- La libertad de expresión
- El derecho de reunión y manifestación.
- La libertad de asociación y sindicación.
- La limitación a la jurisdicción militar
- Sufragio universal
- La aconfesionalidad del estado, es decir la separación total entre estado e iglesia y la libertad de culto.
La declarada aconfesionalidad encendió mucho los ánimos de la iglesia ya que el gobierno reconocía por fin la aprobación del divorcio y del matrimonio civil. Además, se nacionalizaron parte de los bienes de la iglesia y se prohibió a las órdenes religiosas dedicarse a la enseñanza.
Por otra parte, el líder socialista Largo caballero al frente del ministerio de trabajo establece grandes avances laborales como:
- El salario mínimo
- La seguridad social
- El seguro por enfermedad obligatorio
- Una amplia subida de sueldos
- La existencia de vacaciones pagadas
Sin embargo el proyecto más ambicioso del gobierno republicano sería la reforma agraria. Esta ley tenía como objetivo devolver las tierras a los jornaleros y acabar con los latifundios mediante la expropiación de tierras a los grandes terratenientes del sur de España.
Todas estas reformas y la creación de un nuevo estatuto de autonomía para Cataluña a la que se le reconocían nuevos derechos como la creación de la Generalitat enfadaron mucho a los sectores de la derecha más conservadores. Para acabar con la situación, un militar volvería a intentar tomar el poder político. El general Sanjurjo intentó un golpe de estado contra la república que es fácilmente abortado. Sanjurjo es condenado a muerte, posteriormente a cadena perpetua y finalmente le dejan exiliarse en Portugal.
Sin embargo, la lenta implantación de la reforma agraria y laboral crea descontento entre los jornaleros y hay varias insurrecciones anarquistas duramente sofocadas por la República. La dura represión en el pueblo de Casas Viejas crea un escándalo que hace dimitir a Manuel Azaña el cual convoca elecciones adelantadas para 1933, primeras elecciones en las que las mujeres están también llamadas a votar.
Bienio Radical/CEDA 1934 – 1936
A las nuevas elecciones, los partidos de derechas se unen formando la CEDA, a cuyo frente se establece Gil Robles. La CEDA cosecha un gran resultado. Su éxito se debe en gran parte gracias a la financiación para la campaña que recibe de la iglesia y a su vez al voto de las mujeres que, alejadas del ambiente reivindicativo de la industria y más influenciadas por la iglesia que por los sindicatos, votan en su mayoría a las candidaturas de centro-derecha las cuales pactaran para formar gobierno. Alejandro Lerroux del Partido Radical presidirá un gobierno en el que la CEDA no entrará hasta 1934.
Sin embargo, en cuanto la CEDA entra en el gobierno, la coalición de centro-derecha inmediatamente paraliza gran parte de las reformas llevadas a cabo durante el bienio reformista y crea una serie de contrarreformas.
Poco antes de las elecciones, José Antonio primo de Rivera, hijo del dictador Miguel primo de rivera, crea la falange inspirándose en el modelo fascista italiano y en el modelo nazi alemán con un marcado carácter religioso.
La Revolución de Octubre 1934
En el PSOE los llamados bolcheviques, inspirados en las ideas que llegan de la Unión Soviética ganan peso y el partido se radicaliza. Para intentar derrocar el gobierno de la CEDA, el PSOE organiza una gran huelga general en Octubre de 1934 que se acaba convirtiendo en un levantamiento contra el gobierno. La revolución fracasó rápidamente en toda España, En Cataluña el presidente de la Generalitat Lluys Companys es encarcelado. En Asturias, es el único lugar en el que los anarquistas apoyan la revolución de Octubre y los huelguistas se hacen fuertes conquistando las cuencas mineras asturianas y oviedo. La revolución es duramente reprimida por el general Franco dejando más de 1325 muertos en combate y 200 más en la posterior represión, cerca de 3.000 heridos y 30.000 personas son encarceladas incluidos los dirigentes del PSOE y UGT.
El gobierno de la CEDA
A partir de 1935 la CEDA consiguió un mayor peso en el gobierno lo que hizo que se aceleraran las paralizaciones de las leyes. Sin embargo la inestabilidad política con 8 gobiernos diferentes en apenas dos años hacen que Niceto Alcalá Zamora, jefe del estado, disuelva las cortes y convoque elecciones para febrero de 1936.
En esta elecciones que destacan por una alta participación en la que hasta los anarquistas votan, son las izquierdas las que se presentan unidas en el llamado Frente Popular que ganan restableciendo a Manuel Azaña como presidente del gobierno. Los partidos de centro desaparecen casi por completo de las cortes lo que es un signo de como se encuentra la sociedad española, totalmente polarizada.
El Frente Popular 1936
A partir de las elecciones la sociedad española se radicaliza. Las organizaciones juveniles de los partidos se militarizan, las juventudes del PSOE se fusionan con las comunistas y las de la CEDA se pasan en masa a la falange que es prohibida por el gobierno. En los 3 meses siguientes a las elecciones se contabilizaron cerca de 200 muertos. El gobierno de Azaña declaró una amnistía para los presos políticos de la Revolución del 34 con lo que muchos exaltados salieron de prisión para caldear aún más los ánimos en la calle. Para evitar un golpe militar, Azaña envía a los generales más golpistas como Franco o Emilio Mola, lejos de los centros de poder, algo que no les impedirá seguir conspirando contra la República.
En abril de 1936 el presidente de la República Niceto Alcalá Zamora es destituido en el parlamento por la izquierda y es sustituido por el presidente del gobierno Manuel Azaña que a su vez sería sustituido al frente del gobierno por Santiago Casares Quiroga.
La caída de la Segunda República
El grado de inestabilidad social alimentó las ansias de dar un golpe de estado a los sectores más conservadores del ejército. Sin embargo había tres diferencias fundamentales entre este golpe militar y el de 1923 dado por Miguel Primo de Rivera:
- En este caso no todo el ejército estaba unido
- No se podía contar con el apoyo del jefe del estado
- La respuesta de los sectores de izquierda más radicales sería violenta
El 13 de julio de 1936 José Calvo Sotelo,el dirigente monárquico más influyente, era asesinado. Esta muerte hizo que sectores que no estaban convencidos de tomar parte en un golpe militar como la CEDA, los carlistas o militares indecisos, mostrasen su predisposición al golpe que se inició el 18 de julio de 1939… pero esa ya… es otra historia.
Desde la proclamación de la II República existe una alta conflictividad social. Con incidentes entre exaltados tanto de izquierdas como derechas y a su vez entre estos y las fuerzas del orden. Para solucionar este problema, el gobierno crea en 1932 la Guardia de Asalto
Presidentes de la Segunda República
- Niceto Alcalá Zamora (1931-1936)
- Diego Martínez Barrio (1966)
Presidentes del gobierno durante la Segunda República
- Niceto Alcalá-Zamora y Torres (1931)
- Manuel Azaña Díaz (1931 -1933 / 1936)
- Alejandro Lerroux García (1933 / 1934)
- Diego Martínez Barrio (1933)
- Ricardo Samper Ibáñez (1934)
- Joaquín Chapaprieta Torregrosa (1935)
- Manuel Portela Valladares (1935)
- Augusto Barcia Trelles (1936)
- Santiago Casares Quiroga (1936)
Bandera de la Segunda República
Escudo de la Segunda República